Batman: The Killing Joke (1988)

LA MEJOR HISTORIA SOBRE EL JOKER. 

OBRA MAESTRA DE ALAN MOORE Y BRIAN BOLLAND

 /// Puntuación: 10

Guionista: ALAN MOORE

Dibujante: BRIAN BOLLAND

Colorista: JOHN HIGGINS

Rotulador: RICHARD STARKINGS

No hay mejor forma de empezar esta nueva sección, que con uno de los mayores cómics DC Comics.

Tan solo son 48 páginas de puro arte. El protagonista de la trama no es Batman sino su archienemigo el Joker.

Alan Moore puso frente a nuestros ojos el gran parecido que tienen Batman y el Joker por su locura. Uno para el bien y el otro para el mal.

Se diferencia en su forma de actuar, pues las situaciones difíciles que han tenido que afrontar durante sus vidas han marcado a cada uno. 

Los Flashbacks explican el origen del villano. Empatizando con él cuando era un hombre corriente, trabajando como comediante, y cuidando de su familia.

El Joker siempre estará marcado junto a Batman, pues la culpa de que estuviera así es de él.

No se le ocurre otra idea que atormentar a El Caballero Oscuro haciendo sufrir a sus más allegados, véase el comisario Gordon, y su hija.

Ha Brian Bolland lo conocimos en la serie limitada "Camelot 3000" de DC Comics. 

Estamos ante una de las mejores etapas en la carrera de Alan Moore, con una obra anterior "Watchmen", que es otra obra maestra.

Chiste del Joker a Batman: "Había una vez dos tipos en un manicomio y una noche deciden que ya no les gusta vivir en él. ¡Así que deciden escaparse! Entonces se suben al tejado y ahí, ven las azoteas de los edificios de la ciudad, que se pierden en el horizonte bajo la luz de la luna [...] que se pierden hacia la libertad. El primer tipo da un salto y cruza sin problemas. Pero su amigo no se atreve —porque teme caerse—. Entonces el que ha saltado tiene una idea y dice: «Llevo una linterna encima alumbraré con ella la distancia que separa ambos edificios para que así puedas caminar por el haz de luz». Pero el otro niega con la cabeza, y dice: «¿Pero acaso crees que estoy loco?. ¡La apagarías cuando fuera por la mitad!»."

Gracias a ella sirvió de inspiración para crear nuevas historias y películas.

Una de ellas fué para el director Tim Burton a la hora de llevar a la gran pantalla "Batman" estrenada en 1989. 

 "«Nunca fui un gran fan de los cómics, aunque la imagen de Batman y el Joker siempre me ha encantado. La razón por la que nunca he sido un fan de las historietas —y creo que esto comenzó desde que era niño— es porque jamás supe cuál era la viñeta que se suponía tenía que leer. No sé si se trataba de dislexia o de qué, pero por eso me encantó Batman: The Killing Joke, porque por primera vez pude saber cuál leer. Es mi favorito. Es el primer cómic que me ha llegado a encantar. Y el éxito de esas novelas gráficas hizo más aceptables nuestras ideas»."

También se valió de "The Dark Night Returns" del gran Frank Miller.

El director Christopher Nolan le entregó al actor Heath Ledger una copia de la obra para que adquiriera inspiración a la hora de interpretar al villano.

A Nolan le sirvió también para dotar el desequilibrio mental y caótico del Joker en la manipulación a Harvey Dent, en comparación al trato de James Gordon en el cómic.

Inicialmente la historia iba a tratar sobre Batman y Judge Dredd (Bolland dibujó para el personaje).

En aquel tiempo, el editor era Len Wein (co-creador de Swamp Thing), y la idea no le pareció buena. Llegó a la conclusión de que mejor era que uno de los villanos de Gotham hiciera frente a su héroe. 

Moore y Bolland pensaron que el Joker, el mayor villano de Batman, sería la opción ideal.

Bolland empezó el proceso de escenificación, creando 128 páginas.

Dennis O`Neil reemplazaría al editor original. Este cambio retrasó en casi dos años la obra.

Pues estaba más ocupado en editar las obras de Frank Miller: "Year One", y "The Dark Night Returns".

Palabras de Dennis O`Neil: "«Es un problema de los editores que no deseaba tener, no quería tener que estar molestando a nadie. Así que traté de contratar a profesionales que cumplieran con lo que dijeron que harían. [...] Con otros artistas siempre se debía establecer una fecha límite y eso era algo horrible»."

Moore utilizó un estilo de narración similar a su última obra "Watchmen", que le funcionó francamente muy bien.

En cuanto al tratamiento de Barbara Gordon que en aquel entonces ya era Batgirl, se realizó de una forma totalmente radical y nueva.

Además, no tuvo ningún impedimento por parte del anterior editor.

Como homenaje y  referencias a las primera historietas de la editorial, se valió del origen del villano para unirlo con el nombre de Red Hood.

Este nombre hizo aparición en el cómic "The Man Behind the Red Hood" del año 1951, y "Detective Comics" número 168. Como dato curioso, no se sabía la identidad trás la capucha roja.

Bolland alabó la trama de Moore comentando: "«Grandes deseos de trabajar con uno de los guionistas más aclamados [de ese momento]»". 

Y, el reto que tenía era: "«Uno de los problemas a superar era el sentimiento de que esto es lo mejor que pude hacer en mi carrera, yo solo deseaba en esos momentos estar a la altura de mis expectativas»".

La respuesta de la crítica por aquel entonces fue variada, pero las ventas fueron un éxito.

La recepción de la obra llegó al punto del que el propio Moore no estuviera satisfecho con el resultado final, pero en comentarios posteriores, mencionó: «Definitivamente, al final del día, es una historia sobre Batman y el Joker, no trata sobre nada que vayas a encontrar en la vida real, porque ambos personajes no son como cualquier ser humano que haya vivido jamás. No proporciona ninguna información humana importante. Ahora, dicho esto, sé que he soltado pestes implacablemente desde que salió. Quiero decir que cuando me molesto con algo, me dura décadas. Por otro lado, he visto los demás —ha habido peores libros de Batman— y probablemente no es tan malo como lo he pintado. Ciertamente se han hecho peores cosas con Batman o con muchos otros en ese sentido. Así que en contexto, no es tan mal libro como dije que era. Eso en términos de lo que quiero de un trabajo propio. Sí, fue algo que yo pensé, que era torpe, mal interpretado y que no tenía importancia humana real. Trata solo de una pareja de personajes que no relata el mundo en modo alguno».

Como siempre el tiempo da la razón, y en la actualidad "Batman: The killing Joke" es una de las obras maestras de la industria del cómics.